La rivalidad entre Da Vinci y Miguel Ángel
SaludArte | 21/02/2022 | Gelmin González
El movimiento renacentista significó para el arte un mayor interés por la razón y un mayor distanciamiento con la religión. La individualidad, el perfeccionismo, la armonía y el apego a la mitología eran las principales características que los artistas de la época trataban de reflejar en sus obras.
La Italia del siglo XIV, fue impulsora de esta corriente artística y fue en ese país donde grandes artistas de la historia lograron destacar por sus cualidades con los pinceles, el cincel o la pluma.
Una de las rivalidades artísticas más grandes de las que se tiene registro fue protagonizada por los dos exponentes más importantes del renacimiento, Leonardo Da Vinci y Miguel Ángel, el maestro y el alumno, estos dos personajes, se encontraron en Florencia, en 1504, para ese año Da Vinci ya era un artista consagrado, pues había pintado La Ultima Cena y se encontraba trabajando en La Gioconda (La mona lisa), por otra parte Miguel Ángel, destacaba por la majestuosidad del David, que acababa de esculpir hace unos meses.
Ambos trabajaron juntos a inicios de la primera década de 1500 a encargo de los altos funcionarios de Florencia. A Da Vinci se le encomendó pintar “La Batalla de Anghiari, mientras que a Miguel Ángel le encargaron “La Batalla de Cascina”, a este trabajo en conjunto se le conoce como “Las Batallas perdidas” porque ninguno pudo concluir sus obras, estas duelo de pintores había sido pensado para escoger al mejor artista de todos los tiempos, sin embargo, ambos renunciaron a la competencia casi al empezar a pintar.
Al final solo quedaron los dos bosquejos colgando en un salón, ambos se concentraron en otros proyectos y decidieron continuar con su carrera. Según Benvenuto Cellini, escultor, grabador y escritor florentino, las obras quedaron inconclusas, pero sirvieron de escuela para el mundo, pues muchos artistas iban a verlas y a analizarlas.
Durante casi una década los bosquejos se mantuvieron en ese salón, hasta que en 1512 un rival celoso irrumpió en el lugar y partió la de Miguel Ángel. La batalla para conocer quién fue el mejor artista del renacimiento sigue siendo debatible, ellos la vivieron en carne propia, pero en la actualidad miles de personas la siguen discutiendo año con año.